Crisa, de 28 años, reside en Madrid desde hace cuatro años.
«Soy músico violista formada en el Sistema de Orquestas de Venezuela y fui miembro de la ya extinta Orquesta Sinfónica Juvenil Teresa Carreño, así como músico invitada dentro de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar. En Venezuela, no tuve la oportunidad de hacer la licenciatura en música por las dificultades que conlleva vivir sola en una ciudad como Caracas sin ayuda económica familiar ni lugar fijo de residencia, solo estaba concentrada en tocar para crecer dentro de la institución y eso era lo que me mantenía luchando por un sueño que llegué a lograr. Durante más de cinco años, pertenecí a las Orquestas Cumbres de mi país. Luego de tomar la dura decisión de emigrar, tuve que sacrificar todo lo construido hasta el momento, llevándome conmigo tan solo la experiencia y los recuerdos.
En Madrid solo me avala mi experiencia y he tenido la dicha, después de pasar por muchos trabajos (y no siempre con las mejores experiencias) de trabajar ahora como profesora de música por horas. He participado y colaborado en distintas fundaciones, agrupaciones y proyectos educativos, en la mayoría de forma temporal.
Todas estas experiencias me han servido para descubrir a través de la educación, la mejor vía de retomar la música como mi medio de comunicación, mi trabajo y mi vida.
Esta oportunidad me abrirá puertas para toda la vida.»